Política
Lilia Lemoine y Marcela Pagano protagonizaron un fuerte cruce durante el informe de gestión
La sesión en la Cámara de Diputados se tornó caótica durante la presentación del Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, con fuertes enfrentamientos entre oficialistas y exmiembros de La Libertad Avanza que derivaron en gritos y provocaciones.
POR REDACCIÓN
La presentación del Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ante la Cámara de Diputados derivó rápidamente en un episodio tenso y conflictivo. La sesión, que comenzó con el informe de gestión, se vio interrumpida por un fuerte enfrentamiento entre diputados oficialistas y exintegrantes del bloque Coherencia, que hasta hace poco formaban parte de La Libertad Avanza.
El primer foco de tensión surgió cuando el diputado Carlos D’Alessandro cuestionó a Francos sobre denuncias de corrupción en la Agencia de Discapacidad y preguntó si el oficialismo podría haber evitado la elección de Martín Menem, mencionado en audios atribuidos a Diego Spagnuolo, como presidente de la Cámara. Esta intervención generó gritos provenientes del sector libertario, quienes acusaron de “traición” a sus excompañeros de bloque, entre ellos la diputada Lilia Lemoine, quien fue una de las más vehementes en sus expresiones.
La situación escaló cuando la diputada Marcela Pagano, opositora al oficialismo desde hace meses, interrogó a Francos sobre la presencia de supuestos exagentes de inteligencia trabajando bajo su órbita. En respuesta, las diputadas oficialistas María Emilia Orosco, Lilia Lemoine y Juliana Santillán intervinieron para interrumpir a Pagano, llegando a tapar su contacto visual con Francos y a grabar videos con sus celulares mientras intercambiaban gritos.
El recinto se convirtió en una escena caótica con varias legisladoras alzando la voz y desplazándose por los pasillos. El presidente de la Cámara, Martín Menem, intentó calmar la situación y pidió que las diputadas libertarias regresaran a sus asientos, pero se negó a imponer sanciones aduciendo que los diputados se mueven constantemente durante las sesiones.
En medio de las tensiones, el diputado Fernando Carbajal, del bloque Democracia, solicitó a la presidencia que se restableciera el orden, mientras que la libertaria Nadia Márquez defendió a sus compañeras y negó cualquier amenaza hacia ellas. Estas conversaciones, que debían ser privadas, fueron escuchadas en toda la sala debido a que los micrófonos permanecían abiertos.
El conflicto incluyó acusaciones cruzadas: el bloque libertario denunció a Carbajal por supuestamente “invitar a pelear” a la diputada Valverde, mientras que el propio Carbajal afirmó que fueron las mujeres del bloque libertario quienes la insultaron. Oscar Zago, diputado del MID, calificó la situación como “un papelón” y pidió un cuarto intermedio para convocar a una reunión urgente entre los presidentes de los bloques y la presidencia de la Cámara, pero Menem rechazó la propuesta.
Durante gran parte de la sesión, las diputadas Santillán y Lemoine permanecieron de pie alrededor de Pagano, mientras algunos de sus compañeros de bloque reaccionaban con risas. Cristian Ritondo, jefe del bloque PRO, optó por no intervenir directamente pero saludó a Carbajal y le solicitó que volviera a su banca con tranquilidad.
El ambiente en la Cámara se fue tornando cada vez más tenso, y las preguntas sobre las denuncias de corrupción se multiplicaron. Finalmente, cuando comenzó la segunda tanda de preguntas, el bloque libertario decidió retirarse al bajo recinto, dejando en evidencia el creciente malestar de la oposición por el papel de ese bloque durante la sesión.