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Provinciales > A cinco años

Hijos de la pandemia en San Juan: crónica de la crianza en aislamiento

Los niños nacidos durante la pandemia han crecido en un mundo transformado por el distanciamiento social y las pantallas. A través de las historias de padres como Romina González, se explora cómo la crianza en aislamiento dejó huellas profundas en estos pequeños.

20 de marzo de 2025
Romina, su pareja Leonardo Quiroga y el pequeño Hilario, el día de su bautismo entre barbijos. FOTO: Gentileza.

Romina González es mamá. Durante el 2020 atravesó el embarazo y parto de Hilario, su primer hijo. El niño nació en un mundo con “distanciamiento social”, la consigna del “quedate en casa” y barbijos. Una modalidad que adoptó pantallas para comunicarse y “acercarse”. De lavado de manos con instructivo. Ahora atraviesa su segundo embarazo y todo es diferente, aunque hay prácticas que quedaron instaladas en el día a día. Así, pasaron cinco años desde el 20 de marzo del 2020 en el que comenzó la medida sanitaria anunciada en la noche anterior por el presidente Alberto Fernández

En este contexto, DIARIO HUARPE dialogó con la periodista y mamá de tiempos de aislamiento, que respondió: ¿en qué mundo están creciendo los niños que nacieron en pandemia?

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Embarazo en soledad

Romina González es periodista y fue instructora de gimnasia. El 20 de marzo del 2020 tuvo que reinventarse, en ese momento tuvo que cambiar de trabajo y aún no sabía que estaba embarazada de Hilario. La noticia llegó recién en mayo. “Ahora que lo veo a la distancia, noto que fue un embarazo en soledad. Para los controles sólo entraba yo, tenía que rogar que dejaran entrar al papá”, comentó. “Ahora me doy cuenta lo diferente que fue, ahora voy y vengo. Tengo una red de apoyo que en el primer embarazo no estuvo”, agregó.

En diciembre nació Hilario, pero su familia lo conoció recién en la fiesta de fin de año, en una celebración con no más de 10 personas, que eran las habilitadas por ley.

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La educación y el cambio tecnológico

El 2022 trajo consigo el inicio del aprendizaje de Hilario en el jardín maternal. Para Romina, uno de los aspectos que más marcó este comienzo fue la manera en que la pandemia había alterado la forma de enseñar, aún en los primeros años de vida. “El niño con un año y meses se lavaba las manos constantemente, aunque no fue algo que le enseñamos activamente. Es un hábito que quedó, lo aprendió como parte de vernos a nosotros. Él llevaba su escalerita hasta el lavamanos y hacía todos los pasos”, explicó Romina. Pero no solo los hábitos de higiene marcaron a los niños nacidos en pandemia. Las pantallas, esas que habían sido la única forma de enseñanza durante el confinamiento, también fueron inevitables. El uso de dispositivos electrónicos para clases virtuales se extendió con rapidez, adaptándose al contexto de distanciamiento.

Romina también compartió que se mostró más atenta al uso de pantallas por parte de su hijo. “Sí tratamos de estar más presentes en cómo usa y qué ve. Le gustan mucho los juegos de memoria, pero quizás si hubiera sido en otro contexto, no nos hubiéramos dado cuenta de lo que usa. Nos puso más atentos”, dijo.

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En San Juan, como en otras provincias, la educación híbrida llegó para quedarse. Con la implementación de herramientas como la Inteligencia Artificial, el ciclo lectivo 2025 comienza con una modalidad mixta, combinando lo presencial con lo digital. Esta nueva realidad de la enseñanza se instauró como una alternativa necesaria para la adaptación post-pandemia, con el objetivo de ofrecer una experiencia educativa más dinámica, aunque también más compleja.

Una socialización transformada

En cuanto a la socialización, Romina se mostró optimista. “No detecto inconvenientes en Hilario. Creo que el recuerdo es más fuerte en nosotros. En ellos no lo veo como ese 'trauma'. El 'vamos a salir mejores' no lo termino de ver del todo", reflexionó. Aunque los niños nacidos durante la pandemia se vieron limitados en su socialización en los primeros años de vida, la joven mamá consideró que para ellos la adaptación fue gradual, sin el peso de una experiencia traumática. A diferencia de lo que muchos esperaban, esos pequeños no parecen haber internalizado de forma significativa el aislamiento social o la restricción de contacto físico.

Hilario nació en pandemia, él es uno de los sanjuaninos que recibió un mundo diferente. Uno de los niños de la generación alpha, a los que términos como inteligencia artificial y catástrofe sanitaria no le serán ajenos. Sin embargo un mundo distinto que empezó con calles vacías y saludos con el codo. 

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