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El semillero tecnológico de San Juan metió primera con casi 400 chicos
Esta iniciativa de las carteras de Producción y Educación busca despertar vocaciones tecnológicas y reforzar habilidades clave para el futuro.
Este lunes comenzó “Verano Tech”, la colonia tecnológica que impulsa el Ministerio de Producción a través de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación y en conjunto con el Ministerio de Educación. Son casi 400 chicos que, en época de vacaciones de verano, eligen la tecnología por encima de la pileta en busca de capacitarse en los talleres de Robótica, Impresión 3D, Dibujo Digital y Diseño de Videojuegos.
Este programa tiene lugar en el Centro de Economía del Conocimiento e Innovación (CECI) y recibe a chicos que van desde los 9 hasta los 17 años. Esta medida busca ser la chispa que inicie la curiosidad en nuevas vocaciones tecnológicas e industriales. Pero, ¿qué pasa cuando la curiosidad crece?, ¿dónde podrán continuar los aspirantes desarrollando esa vocación en la provincia? DIARIO HUARPE conversó con los chicos y también con los ministros de las áreas involucradas para conocer la continuidad de este programa.
El ministro de Producción, Gustavo Fernández, dijo que "estos programas seguirán durante el año. Pero donde nos queremos enfocar es en reforzar la base en matemática. El año pasado hicimos un relevamientos en los chicos y el diagnóstico que recibimos es que estos jóvenes tienen mucha curiosidad y entusiasmo por seguir algunas de las carreras STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), pero la base de matemática no cumple con los objetivos por lo que muchos de esos quedan en el camino, incluso en el cursillo de ingreso”, comentó.
“Vamos a trabajar junto al Ministerio de Educación para trabajar junto al programa “Comprendo y Aprendo”, de alfabetización y fortalecer en el área de matemática”, agregó.
En la misma línea continuó la ministra de Educación, Silvia Fuentes. “La crisis de alfabetización afecta a toda la región por lo tanto no somos ajenos. Este año continuará el “Comprendo y Aprendo” y este espacio (por el CECI) servirá para dar talleres relacionados a las competencias tecnológicas, al igual que el objetivo es que las escuelas puedan visitar este espacio”, explicó la funcionaria.
Un proyecto para las industrias del conocimiento
En un momento en el que la Inteligencia Artificial se anticipa como un horizonte inmediato, este programa apuesta a algo que parece una contradicción: darle humanidad a las vocaciones tecnológicas.
Mientras la incertidumbre de hasta dónde el algoritmo configura el día a día, una generación de chicos y chicas apuesta al futuro y la provincia prepara una matriz tanto educativa como tecnológica para recibirlos. El objetivo es que la chispa de la creatividad no se apague.
La experiencia, en primera persona
Franco tiene 9 años, vive en Rivadavia y llegó por el taller de impresión 3D. En la primera clase aprendió a deformar una figura, a esculpir sobre un monitor. “Me gusta Superman y los superhéroes, quiero hacer muñecos de eso. También me gustaría ser mecánico”, comentó. A sus costados, mientras habla, las impresoras funcionan dejando filamentos apilados. Los demás chicos también moldean, algunos hacen una casa, otros robots. Uno pregunta cómo se puede borrar una sección y todos, a la vez, prestan atención mientras viven una vacaciones diferentes, lejos de las piletas y más cerca de la tecnología.