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Matías Agustín Ozorio, alias Pequeño J, espera extradición en penal de Cañete
El presunto jefe narco Matías Agustín Ozorio, conocido como “Pequeño J”, cumple prisión preventiva en el penal de Cañete, Perú, a la espera de su extradición a Argentina por el triple crimen de Florencio Varela.
POR REDACCIÓN
El presunto jefe narco Matías Agustín Ozorio, alias “Pequeño J”, se encuentra cumpliendo prisión preventiva en el Penal de Cantera, en el distrito de Nuevo Imperial, provincia de Cañete, región Lima, Perú, mientras espera su extradición a Argentina por el triple homicidio de Florencio Varela.
En las imágenes difundidas se lo observa calmado, esposado, con ojotas y un toallón sobre los hombros, mientras imprime sus huellas y camina entre las celdas de la prisión. Se trata de la primera vez que pisa una cárcel, ya que no registra antecedentes en Perú ni en Argentina, pese a pertenecer a una familia vinculada a delitos violentos en La Libertad de Trujillo.
La prisión preventiva fue ordenada por el juez Cristhian Rafael Chumpitaz Pariona, quien consideró que el imputado podría abandonar el territorio peruano o intentar evadir el proceso judicial. Su abogado, Carlos Sandoval, apeló la medida y aseguró durante la audiencia que su cliente es inocente y se siente indefenso en Argentina.
El Penal de Cantera es un centro de mediana seguridad administrado por el Instituto Nacional Penitenciario (INPE). Aloja principalmente a personas procesadas por delitos comunes, como robo, homicidio, tráfico de drogas y delitos contra el patrimonio, y no suele albergar jefes de organizaciones criminales de alto perfil.
Según datos oficiales, la prisión registra altos niveles de hacinamiento, con entre 1.900 y 2.000 internos, lo que representa una sobrepoblación de hasta el 200%. Esto limita el espacio personal, acceso a agua potable, alimentación adecuada y atención médica. En los operativos de requisa se incautan drogas, celulares y otros objetos prohibidos.
El penal forma parte del programa “Cárceles Productivas”, que ofrece talleres de panadería y cuero, donde los internos pueden aprender oficios y producir productos como billeteras, morrales y pan.
Ozorio está imputado por el triple asesinato de Morena Verdi (20), Brenda del Castillo (20) y Lara Gutiérrez (15), cuyos cuerpos fueron hallados el 24 de septiembre en una fosa en Florencio Varela tras haber subido a un vehículo con patente falsa.
Hasta el momento, nueve personas fueron detenidas en el marco de la investigación, incluido Ozorio y su ladero, con otros arrestados vinculados a la propiedad donde ocurrieron los crímenes y al traslado de las víctimas.