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Albardón: dos barrios expuestos a la suciedad y la falta de agua e iluminación
Los vecinos se quejaron por la mala gestión del municipio que lidera Juan Carlos Abarca.
POR REDACCIÓN
En Albardón hay, al menos, dos barrios expuestos a distintos factores que pueden poner en riesgo el bienestar de los vecinos. DIARIO HUARPE fue hasta el departamento que limita al Norte con el Gran San Juan y conoció la realidad de los damnificados, quienes resaltaron los problemas que tienen con el servicio del agua, donde, durante el día, no hay disponibilidad. Asimismo, subrayaron que la iluminación y la basura es moneda corriente
Los habitantes de Albardón no ocultaron su descontento con la situación que los perjudica, ya que diversos vecinos de los barrios y villas cercanas reclamaron por la situación que atraviesan desde hace tiempo. En aquellos lugares, los residentes afirmaron que el agua es el principal problema, con el servicio cortado durante el día y, además, con baja presión del recurso que no permite cargar los tanques.
Por otra parte, la falta de modernización del sistema de iluminación genera que estos sitios sean propensos a caer en las manos de la inseguridad, siendo los ciudadanos los damnificados ante la falta de medidas. Además, se observó cómo la suciedad ha invadido baldíos que limitan con los barrios, una situación que permite apreciar el olor que invade las casas de los vecinos. De esta manera, crece la posibilidad de que, la acumulación de basura, exponga a los habitantes a padecer enfermedades derivadas de esta problemática.
Barrio Presidente Néstor Kirchner
Si bien desde la Ruta 40, en la localidad albardonera de Campo Afuera, se observa gran cantidad de contenedores que demuestran indicios de que la gestión del intendente Juan Carlos Abarca quiere mantener el sitio limpio, en las profundidades del distrito aledaño al Circuito San Juan Villicum, la falta de limpieza es la protagonista. Allí, los vecinos son los que sufren el olor y la putrefacción que los desechos generan a medida que se descomponen. “Nos hace falta que el intendente se acerque al Barrio Kirchner y vea la suciedad que hay en la zona”, comentó indignada una vecina que prefirió resguardar su identidad.
Sin embargo, la problemática se extendió aún más cuando la misma mujer aseguró que también sufren la falta de agua. El conflicto se desencadena porque durante varias semanas el recurso no sube al tanque, lo que les obliga a acumular el líquido en botellas, baldes o tachos.
Villa Evita
Así como en el Barrio Kirchner, los vecinos también aquejan la falta de agua. Una de sus residentes afirmó que el recurso es nulo y, desde el inicio del verano, deben suministrarse en las madrugadas de la misma manera que en el caso anterior para higienizarse o beber.
Una de las residentes del lugar se animó a hablar y dijo que “desde el municipio nadie se hizo presente y, lo peor, es que los funcionarios conocen el problema, porque sucede en todos los barrios”. La vecina afirmó que el recurso también escasea en el invierno, lo que se traduce en que la falta de agua afecta a la zona durante seis meses en el año.
Otra residente de la zona, Jesús Sánchez, también padece esta dificultad. Y es que, la mujer, ya jubilada, no tiene suministro de agua desde hace tiempo. “Tengo agua gracias al aporte de mi hijo, quien me trae desde el barrio Santa Bárbara I para proveerme con el recurso”, comentó indignada.
Pero la problemática no se detiene allí, sino que, además, las calles de aquel lugar denotan una falta de iluminación que deriva del esfuerzo insuficiente por mantener la luminaria. Además, hace tiempo informaron que iban a instalar postes de luz en las paradas de colectivos, debido a que la luminosidad en esos sitios brillaba por su ausencia.
Sin embargo, esto quedó solo en promesas, ya que solo pusieron los postes, no las lámparas. La combinación de estos factores provoca que sea una zona propicia para que la inseguridad invada la vida de los habitantes.