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Carlos III comenzó un tratamiento con cannabis medicinal

El rey del Reino Unido atraviesa una etapa delicada en su lucha contra el cáncer. Fuentes cercanas confirman que sumó terapias alternativas como el cannabis medicinal y el controvertido método Gerson.

POR REDACCIÓN

17 de abril de 2025
Carlos III habría comenzado a incorporar terapias complementarias. Foto: gentileza 

La salud del rey Carlos III sigue siendo motivo de atención e incertidumbre en el Reino Unido y en todo el mundo. Desde su diagnóstico de cáncer a principios de 2024, el monarca británico ha enfrentado un complejo proceso médico que lo llevó a explorar alternativas complementarias para sobrellevar la enfermedad.

En las últimas horas, medios británicos informaron que el rey comenzó un tratamiento con cannabis medicinal, una práctica legal en el país desde 2018 para casos específicos de enfermedades graves. Aunque desde el Palacio de Buckingham el silencio predomina, fuentes cercanas a la familia real aseguran que la situación es delicada y que las terapias convencionales no estarían dando los resultados esperados.

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Cannabis medicinal para aliviar los síntomas

Según trascendió, el uso del cannabis en el caso de Carlos III estaría orientado a aliviar dolores crónicos y mejorar su calidad de vida. El tratamiento se administra bajo estricta supervisión médica y forma parte de una estrategia integral para enfrentar la enfermedad sin depender exclusivamente de la quimioterapia.

La decisión del monarca sorprendió a la opinión pública, pero no resulta del todo inesperada. A lo largo de los años, Carlos III ha demostrado un interés particular en la medicina natural y las terapias complementarias, incluso en contextos donde la comunidad médica ha manifestado reservas.

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La polémica terapia Gerson

Además del cannabis, el rey estaría probando la terapia Gerson, un tratamiento alternativo sin validación científica que ha sido fuertemente cuestionado por oncólogos. Esta terapia consiste en enemas de café diarios, una dieta estricta basada en jugos naturales, suplementos vitamínicos y extracto de hígado de bacalao.

El costo de este tratamiento es considerable: se estima en alrededor de 4.900 euros semanales, más 20.000 euros adicionales por el suministro de inyecciones. A pesar de las críticas, allegados al rey afirman que Carlos III “está dispuesto a probar todo lo que esté a su alcance para ganar tiempo y aliviar el sufrimiento”.

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Un momento delicado para la corona

En medio del hermetismo oficial, las decisiones médicas del rey generan una fuerte repercusión pública. Su apuesta por alternativas no convencionales muestra el grado de complejidad de su situación y deja entrever la urgencia por encontrar alivio frente a los efectos del cáncer.

Mientras tanto, la monarquía británica atraviesa un momento sensible. El futuro de la Corona depende cada vez más de la salud de Carlos III, y cualquier avance —o retroceso— en su tratamiento es seguido de cerca por la prensa, los especialistas y la ciudadanía.

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