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Cerraron una escuela de más de 70 años por incendios subterráneos
Las autoridades del Ministerio de Educación tomaron la decisión debido al peligro que corren los 70 alumnos víctimas de esta problemática ambiental.
POR REDACCIÓN
Los incendios subterráneos provocaron un nuevo conflicto en la zona rural de Rawson. Si bien en esta oportunidad la problemática ambiental no se registró en el Médano de Oro, sitio donde este problema es habitual, se desencadenó en Colonia Rodas, una localidad vecina. El Ministerio de Educación se vio obligado a cerrar la escuela José Joaquín Berrutti debido a que el fuego originado debajo de la tierra es una amenaza para los 70 alumnos que asisten a la institución educativa y también para los docentes y trabajadores del establecimiento educativo.
La creciente sequía que ha azotado al Médano de Oro durante más de dos décadas dejó resquicios que, ante la falta de medidas gubernamentales, generó las consecuencias que hoy son una realidad.
Lo que sucedió es que los incendios subterráneos, en conjunto con los efectos que provocó la falta de lluvias a lo largo de los años, generaron que el terreno donde se encuentra la Escuela Berrutti se deforme y encienda las alarmas. Esta situación causó que las autoridades del Ministerio de Educación decidieran cerrar de forma permanente la construcción edilicia de 70 años de antigüedad porque pone en riesgo el bienestar de los alumnos.
En 2015 se descubrieron las consecuencias que los incendios subterráneos provocaban en la zona y, ante esto, el municipio de Rawson creó un protocolo para actuar y aminorar los efectos de este fenómeno. Sin embargo, desde ese momento no hubo más información al respecto.
El reclamo de los padres de los alumnos
Los chicos que asistían a dicha escuela, ubicada en Santa Teresa y Labrador, fueron trasladados al establecimiento escolar Héctor Conte Grand, con sede Calle 10 y Alfonso XIII, a unos cuatro kilómetros de distancia. Esta situación provocó la irritación de los padres de los alumnos, quienes reclamaron por la desprolijidad con la que las autoridades realizaron las gestiones, ya que fueron notificados del cambio pocos días antes del inicio de clases.
En diálogo con DIARIO HUARPE, los padres expresaron su descontento: “Nos dijeron que pondrían una movilidad para trasladar a los chicos al nuevo establecimiento porque nosotros no podemos ir hasta la escuela Conte Grand si surge una emergencia o si debo asistir a reuniones”, comentó Lorena Flores.
En esta línea, la mamá afirmó que la solución más práctica para los alumnos es la construcción de una nueva escuela cerca de la actual para que no deban trasladarse de allí. “Todos los niños que vienen a esta escuela viven cerca”, afirmó Flores. Así también, aseguraron que ellos nunca recibieron advertencias sobre los daños estructurales que tuvo la escuela en el transcurso de los años.