Provinciales > Un regalo que salva vidas
El Colegio Nacional Pablo Cabrera cuenta con un desfibrilador
En el marco de sus bodas de oro, un grupo de egresados de una escuela pública de San Juan tuvo un gesto por demás altruista y realizó la donación de un desfibrilador a su antiguo colegio. Además, capacitaron sobre su uso y maniobras de RCP a toda la comunidad educativa.
POR REDACCIÓN
Un grupo de exalumnos del Colegio Nacional Monseñor Pablo Cabrera que cumplen sus bodas de oro y plata de egresados de esa institución, decidieron tener un gesto por demás altruista, y donaron un desfibrilador al establecimiento educativo. Además, se encargaron de brindar una capacitación para toda la comunidad educativa sobre el uso del aparato y maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP).
En diálogo con DIARIO HUARPE, el médico y egresado de este colegio, Armando Rosales, explicó que los exestudiantes de las promociones 1974 y 1999 aunaron esfuerzos y obsequiaron un desfibrilador externo automático para la institución, en agradecimiento de la formación que allí recibieron.
Según explicó Rosales, esta donación consiste en “otorgarle al colegio la factibilidad de que sea una escuela cardioprotegida”, siendo la única de gestión pública en la provincia en contar con esta aparatología.
“La importancia radica en que cualquiera de nosotros, independientemente de nuestra edad, podemos sufrir en cualquier momento lo que se llama una muerte súbita, es decir, un paro cardíaco, que fundamentalmente se debe a un problema cardiológico o cardiovascular, derivando, por ejemplo, en un infarto de miocardio”, enfatizó.
En este sentido, indicó que el tener la disponibilidad de este equipamiento y tener personas capacitadas para su uso en la comunidad educativa, puede marcar la diferencia ante una situación de urgencia, e incluso salvar vidas.
Además, explicó que la proyección realizada en el marco de la donación, establece que las capacitaciones sean brindadas a grupos específicos. Es por eso que se designaron alumnos líderes, la totalidad de los preceptores y un grupo de profesores para recibir los conocimientos. En cuanto a los docentes, se enfocaron principalmente en los de Educación Física, entendiendo que en el dictado de esa materia existen mayores riesgos que pueden representar la necesidad de utilizar el aparato en cuestión.