Provinciales > Ejemplo de superación
El sanjuanino que venció los límites y conquistó la bandera universitaria
Con 25 años y un promedio de 9.50, Nicolás Escobar, estudiante de Psicopedagogía en la Universidad de Congreso, fue distinguido con la bandera institucional. Nació con macrocefalia y meningocele, y se convirtió en el primer estudiante en silla de ruedas en recibir este reconocimiento.
POR REDACCIÓN
Cada mañana, cuando el sol apenas comienza a iluminar las calles de San Juan, una familia se pone en movimiento. La madre, desde su pequeño taller de costura; las hermanas, siempre atentas; y el padre, que trabaja de lunes a lunes en su kiosco para sostener los estudios de su hijo. En el centro de esa escena cotidiana está Nicolás Escobar, o simplemente “Nico”, el protagonista de una historia que emociona, enseña e inspira.
A sus 25 años, Nicolás estudia Psicopedagogía en la Universidad de Congreso y acaba de alcanzar uno de los logros más importantes de su vida: fue distinguido con la bandera universitaria, un reconocimiento reservado a los alumnos más destacados en lo académico y lo humano. Su promedio, 9.50, refleja una dedicación constante, pero detrás de ese número hay una historia de esfuerzo, resiliencia y amor familiar.
Desde pequeño, Nico aprendió que la vida no siempre ofrece caminos fáciles. Nació con macrocefalia y meningocele, una condición neurológica que afecta su movilidad y lo obliga a desplazarse en silla de ruedas. Los pronósticos médicos no fueron alentadores, pero él eligió desafiar las expectativas.
“No fue sencillo”, reconoce. “A veces uno se enoja, se frustra, se pregunta por qué a mí. Pero después entendés que lo que te toca también te forma. Y ahí decidís si te quedás quieto o avanzás”.
Y él avanzó.
Con el apoyo constante de sus padres y hermanas, Nico logró asistir cada día a clases, a pesar de los obstáculos que enfrenta la mayoría de las personas con discapacidad: transporte público sin accesibilidad, veredas en mal estado y escasa empatía social. “Hay días en que todo se complica —cuenta—, pero el estudio me da fuerzas. Siempre soñé con ser profesional y darle ese orgullo a mi familia”.
Nico vive con su madre y sus hermanas. No tienen casa propia, y sus padres hacen grandes esfuerzos para pagar el alquiler y los gastos de la carrera. En ese hogar modesto, sin embargo, abundan el amor, la fe y la esperanza.
“Mi mamá es todo para mí —dice con emoción—. Trabaja más de 14 horas por día cosiendo, a pesar de que tiene Lupus. Mi sueño es poder comprarle una casa. Por eso estudio con tanto empeño.”
Sus profesores lo describen como un estudiante ejemplar, respetuoso y solidario. “Nico no solo tiene un promedio excelente —explica una docente—, tiene una calidad humana que contagia. Nos recuerda que estudiar es un privilegio y un acto de coraje.”
Este año, Nicolás será el primer estudiante en silla de ruedas en recibir la bandera institucional de la Universidad de Congreso, un hecho inédito en Argentina que marca un paso adelante en materia de inclusión educativa.
“Recibir la bandera es una alegría inmensa. Pienso en todo lo que costó llegar hasta acá, en los días difíciles. Esta bandera no es solo mía, es de mi familia y de todos los que me ayudaron a seguir”, afirma.
Su meta, una vez recibido, es seguir estudiando y trabajar con niños con dificultades de aprendizaje. “Quiero ayudarlos a descubrir que pueden, que siempre se puede”, dice con una sonrisa.
Nico no busca protagonismo ni admiración. Su historia es una muestra de superación, una lección para toda la sociedad. “La discapacidad no te define. Lo que te define es lo que hacés con lo que tenés”, reflexiona.
Su ejemplo interpela a las instituciones y a la comunidad: la verdadera inclusión no se construye solo con rampas, sino con empatía, compromiso y oportunidades reales.
En su silla, Nico avanza. Pero con él, también avanza la esperanza de una provincia y un país que comienzan a mirar la discapacidad con respeto, igualdad y admiración.
Porque cuando el mérito lleva su nombre, la bandera no solo se alza en una universidad: se alza en el corazón de todos.