País
El turismo en Mendoza no repunta y no creen que mejore en 2025
Empresarios del sector en Mendoza advierten que la caída en la actividad es sostenida y que la recuperación tomará tiempo. La baja del dólar y la falta de promoción afectan la llegada de visitantes.
POR REDACCIÓN
Pese a ser uno de los destinos más atractivos del país, el turismo en Mendoza no logra recuperar los niveles previos a la crisis. La ocupación hotelera sigue cayendo, los turistas gastan menos y la competencia de Chile y Brasil se hace sentir. Desde el sector no esperan una mejora significativa en 2025 y advierten que la falta de promoción y la situación económica complican aún más el panorama.
Según Santiago Alsina, presidente de la Asociación de Hoteles de Turismo de Mendoza, la ocupación en la provincia ha caído notablemente en comparación con 2023 y 2024. En la ciudad de Mendoza, el promedio no supera el 55%, cuando históricamente en marzo superaba el 75%, según datos de la Cámara Hotelera de Mendoza.
Los empresarios coinciden en que la menor cantidad de turistas también se refleja en un menor consumo. Diego Stortini, vicepresidente de la Federación Económica de Mendoza, explicó que, si bien los fines de semana largos siguen atrayendo visitantes, el gasto por persona ha disminuido considerablemente, especialmente en el sector gastronómico.
Desde la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica de Mendoza (Aehga), Edmundo Day señaló que uno de los principales problemas es el ajuste en la promoción turística. El recorte en organismos como el Instituto Nacional de Promoción Turística (Inprotur) redujo significativamente la visibilidad de Mendoza en el exterior, lo que dificulta la llegada de turistas extranjeros.
Otro factor clave es el tipo de cambio. La brecha cambiaria que hacía atractiva a Argentina para el turismo extranjero desapareció con la devaluación y la estabilización del dólar, lo que encareció el destino. Esto generó que Brasil y Chile se volvieran más accesibles para los argentinos, lo que explica el fuerte aumento de viajes al exterior.
¿Qué esperar para los próximos meses?
Para Semana Santa y los próximos fines de semana largos, se espera una ocupación aceptable, aunque menor a la de años anteriores. Los hoteles de 4 y 5 estrellas proyectan una ocupación del 60%, según Alsina, mientras que Stortini estima que el fin de semana largo alcanzará un 80% de ocupación en toda la provincia.
Sin embargo, los empresarios no creen que la recuperación sea rápida. “Mendoza sigue siendo un destino elegido, pero el contexto es adverso. No esperamos mejoras en el corto plazo”, advirtió Day. En la misma línea, Stortini señaló que hasta octubre o noviembre la situación seguirá siendo compleja.
Si bien la provincia no puede influir en la macroeconomía, sí puede desarrollar estrategias para fortalecer el turismo. Desde el Ente Mendoza Turismo (Emetur) y las cámaras empresariales trabajan en una nueva campaña digital para promocionar el destino.
Uno de los principales desafíos es hacer más accesible la oferta turística. “Mendoza tiene una buena performance en captar audiencias digitales, pero los turistas tienen dificultades para encontrar opciones que se ajusten a su presupuesto”, explicó Day. La estrategia se enfocará en visibilizar alojamientos, bodegas, turismo de aventura y opciones gastronómicas de distintos rangos de precios.
Otra apuesta es potenciar el turismo de eventos y convenciones (MICE). Marcelo Rosental, presidente de la Cámara Hotelera, destacó que este segmento es clave para la reactivación, pero alertó que Mendoza ha perdido eventos importantes. Como ejemplo, mencionó que dos partidos de Los Pumas se jugarán en San Juan y Córdoba, perdiendo la provincia la oportunidad de recibir visitantes y dinamizar la economía local.
A mediano y largo plazo, los empresarios consideran necesario un plan estratégico de turismo, que establezca objetivos claros y coordine esfuerzos entre el sector público y privado. “Mendoza necesita una visión compartida, que potencie no solo el enoturismo, sino también otras experiencias como el turismo cultural, deportivo y de naturaleza”, afirmó Stortini.
La estabilidad cambiaria redujo drásticamente la llegada de turistas extranjeros. Según datos del Indec, en febrero ingresaron al país un 30,7% menos de visitantes internacionales que en el mismo mes de 2024. En contraste, la cantidad de argentinos que viajaron al exterior aumentó un 74,2%.
En Mendoza, el aeropuerto registró una caída del 18% en la llegada de turistas extranjeros en febrero, mientras que las salidas al exterior se duplicaron (+108,8%). En el paso Cristo Redentor, el ingreso de turistas internacionales creció un 12,5%, pero el número sigue siendo un 61,2% menor al de 2023.
El turismo mendocino enfrenta un escenario difícil y sin soluciones inmediatas. Si bien el sector confía en que Mendoza sigue siendo un destino atractivo, la recuperación dependerá de factores económicos, inversión en promoción y estrategias para captar más turistas nacionales.
Por ahora, la incertidumbre persiste, y los empresarios no esperan un repunte hasta 2025 o incluso más allá.