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Lisandro Sisterna, el orgullo de la familia Dakar
En un emocionante reencuentro, la familia y los amigos del navegante lo esperaron en el aeropuerto de Las Chacritas y le dieron la bienvenida luego de lograr la tercera posición en el Rally Dakar. Habló con DIARIO HUARPE y manifestó su alegría por el éxito obtenido.
POR REDACCIÓN
El Rally Dakar 2025 fue una sorpresa para el deporte sanjuanino, ya que Lisandro Sisterna, junto al conductor español Pau Navarro, lograron la tercera posición en la categoría Challenger. Este miércoles, tras la hazaña en Arabia Saudita, los amigos y la familia, reconocida por su amor al automovilismo y sobre todo a este tipo de competencias, lo recibieron en el aeropuerto de Las Chacritas con pancartas y carteles en los que expusieron su orgullo por el navegante.
Sisterna y compañía, a bordo de un buggy Taurus de la escudería francesa BBR Motorsport, quedaron a 1H 30’ 13’’ de los campeones de la clase Challenger, los argentinos Nicolás Cavigliasso y Valentina Pertegarini. De esta manera, conquistaron el bronce en su primera participación y, para la provincia, Sisterna se convirtió en el primero en ganar una etapa y, además, obtener una presea de la competición.
En una entrevista con DIARIO HUARPE, el joven no ocultó su euforia por la conquista y dijo: “Estoy muy feliz, esto es algo histórico. Todavía no asimilo lo que logramos”. Además, manifestó que, en su debut, las primeras etapas fueron complicadas, pero que una vez que superaron la mitad de la competición y se adaptaron, pudieron sacar lo mejor de sí. Asimismo, recalcó que, en cuanto al terreno, Sudamérica es superior a Arabia Saudita.
Una familia orgullosa
El padre y el hermano, Lino y Juan Pablo Sisterna, antiguos competidores del Dakar, también compartieron palabras de satisfacción por el gran resultado de Lisandro: “Tener un hijo ganador en una competencia tan destacada y en un deporte que es parte de nuestra vida, es el sueño de todo padre. Estoy muy feliz y orgulloso”, remarcó el papá. Además, Juan Pablo, impulsor de Lisandro, dijo que “es un orgullo muy grande. Solamente que fuera parte de un equipo y participe en la competición, ya era un sueño para nosotros”.
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Finalmente, el ganador del bronce en la categoría Challenger, festejó a la salida del aeropuerto Domingo Faustino Sarmiento, escoltado por la policía y transportado por un autobomba en un trayecto que atravesó la Plaza de Santa Lucía, luego la Plaza 25 de mayo y finalizó en el Centro Cívico.