Sociedad > Impacto
Murió el 'Turco Julián' Simón, represor condenado por delitos de lesa humanidad
Falleció a los 84 años mientras cumplía condena en Campo de Mayo. Había sido sentenciado en múltiples juicios por su rol en el terrorismo de Estado.
POR REDACCIÓN
Este martes 25 de marzo falleció a los 84 años Julio Héctor "El Turco Julián" Simón, exintegrante de la Policía Federal Argentina y uno de los torturadores del centro clandestino de detención El Olimpo durante la última dictadura cívico-militar. Simón cumplía condena en la Unidad N.º 34 del Servicio Penitenciario Federal, en Campo de Mayo, tras haber sido sentenciado en tres oportunidades por delitos de lesa humanidad.
En 2010, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal (TOF) N.º 2 de la Ciudad de Buenos Aires lo condenó por su participación en el secuestro, tortura y desaparición de 181 personas en el circuito clandestino de detención conocido como "ABO", conformado por los centros "El Atlético", "Banco" y "El Olimpo".
Nacido el 12 de agosto de 1940, Simón fue colaborador del Batallón de Inteligencia 601 y permaneció prófugo en Brasil tras el regreso de la democracia en Argentina. Regresó al país cuando se sancionaron las leyes de Punto Final y Obediencia Debida en 1986 y 1987.
En 2001, la justicia federal que investigaba la apropiación de Claudia Victoria Poblete procesó a Simón y declaró la inconstitucionalidad de las mencionadas leyes. Este fallo fue clave para que la Corte Suprema de Justicia las invalidara definitivamente.
En 2005, el Tribunal Oral Federal N.º 5 de la Capital Federal lo condenó a 25 años de prisión por la "detención ilegal y torturas" a José Poblete y Gertrudis Hlaczik, y por la apropiación de su hija, de ocho meses de edad. Años después, recibió otra condena a 23 años de prisión en la causa Batallón 601, por secuestros, torturas y desaparición forzada de personas entre 1979 y 1980.
Según testimonios del juicio, Simón usaba una bandera nazi como brazalete y mostraba especial ensañamiento con los detenidos judíos en El Olimpo. El director de cine Jorge Augusto Taglioni, quien estuvo cautivo en el centro clandestino, relató que el represor también marcaba a sus víctimas con esvásticas.
Hace dos semanas, la Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal rechazó por unanimidad un pedido de la defensa de Simón para cumplir su pena bajo arresto domiciliario. Sus abogados argumentaban que padecía diversas enfermedades, entre ellas diabetes, hipertensión arterial y deterioro cognitivo.
Los jueces Mariano Borinsky, Javier Carbajo y Gustavo Hornos denegaron el beneficio, sosteniendo que en la Unidad N° 34 se le brindaban los cuidados necesarios y que su familia lo había abandonado completamente.
El fallo enfatizó la gravedad de los crímenes cometidos por Simón, condenado a prisión perpetua como coautor de homicidio agravado, privación ilegal de la libertad e imposición de tormentos contra perseguidos políticos. "Estos hechos fueron encuadrados como delitos de lesa humanidad, por lo que resulta razonable, a la hora de analizar la procedencia de un beneficio como el aquí solicitado, valorar la gravedad de los sucesos involucrados", señalaron los magistrados en su resolución.
Con la muerte de Simón, uno de los principales ejecutores del terrorismo de Estado en Argentina deja un legado de condenas y testimonios que lo señalan como un protagonista central del aparato represivo de la dictadura.