POR REDACCIÓN
19 de noviembre de 2019
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, visitó hoy una colonia desde donde dijo que la decisión de Estados Unidos de dejar de considerar ilegales los asentamientos israelíes en Cisjordania ocupada constituye un "logro enorme para el Estado de Israel". "Estamos aquí en Gush Etzion, un lugar del que fuimos expulsados durante la Guerra de Independencia (Primera guerra árabe-israelí), en un día histórico con otro logro enorme", expresó el mandatario desde uno de los bloques más grandes de colonias. En un encuentro con líderes colonos, Netanyahu apuntó que "la administración de Donald Trump ha reparado una injusticia histórica y reconocido la verdad", y agregó que este logro "durará por generaciones", citó la agencia de noticias EFE. Tras el anuncio ayer del titular de Exteriores, Mike Pompeo, el apodado Bibi ya expresó su agradecimiento y mencionó que "aquellos que niegan categóricamente la legalidad de las colonias no solo niegan la verdad, la historia y la realidad sobre el terreno, sino que también atrasan la causa de la paz, que solo se puede conseguir con negociaciones directas entre las partes". La posición estadounidense refleja que los israelíes "no son colonizadores extranjeros en Judea y Samaria (denominación bíblica para Cisjordania)", declaró Netanyahu, y aseguró que "sigue dispuesto a llevar a cabo negociaciones de paz con los palestinos" para abordar el estatus final de los asentamientos y alcanzar "una paz duradera". Sin embargo, agregó que continuará "rechazando todos los argumentos sobre su ilegalidad", una posición en la que ayer se reafirmó la Unión Europea, que reiteró que considera ilegales los asentamientos en los territorios palestinos ocupados por Israel. Ayer, la reacción palestina a la decisión de Estados Unidos fue contundente. "Una vez más, con este anuncio, la Administración Trump demuestra hasta qué punto" amenaza "el sistema internacional con sus "intentos de reemplazar el derecho internacional con 'la ley de la selva'", reaccionó el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erekat. La mayoría de la comunidad internacional considera que los asentamientos en Cisjordania, bajo ocupación israelí desde la Guerra de los Seis Días de 1967, son incompatibles con la ley internacional y con la Cuarta Convención de Ginebra de 1949, que prohíbe desplazar a población de una potencia ocupante a territorio ocupado. La medida de Estados Unidos rompe con décadas de consenso internacional, como ocurrió cuando reconoció a Jerusalén como capital israelí o la soberanía de Israel sobre los Altos del Golán sirios, también ocupados y anexionados.
Más Leídas
Más Leídas