Policiales > No irá preso
Un hombre que sacó dinero y un préstamo con un celular robado
El delincuente asumió su culpa y en un juicio abreviado obtuvo dos años de prisión, pero no irá a la cárcel y tampoco devolverá el dinero.
Por Ariel Patruceli
Tras un partido de fútbol en Córdoba, un hincha que había ido a alentar a San Martín, le habría robado a otro hincha el teléfono celular y rápidamente realizó operaciones bancarias extrayendo de las cuentas del propietario del teléfono, casi $2.000.000. El dinero fue transferido a sus propias cuentas y por eso fue descubierto, y condenado, no irá a prisión y tampoco devolverá el dinero.
En esta jornada de lunes se llevó a cabo la audiencia de juicio abreviado contra Elías Lionel Flores, un sujeto quien fue hallado culpable del delito de estafa, tras realizar transferencias de dinero desde un celular robado a sus propias cuentas bancarias y billeteras virtuales.
El pasado 9 de diciembre de 2024 el acusado y la víctima se trasladaron a la provincia de Córdoba para alentar al Club San Martín. Tras el partido de fútbol, el grupo de hinchas se fue a festejar a un boliche y el damnificado, Carlos Enrique Fernández, se dio cuenta a las 5 de la mañana que no tenía su teléfono celular Samsung A52, el cual había utilizado por última vez una hora antes.
Al darse cuenta de la falta del celular, el damnificado solicitó a su hija que inicie sesión de Gmail desde su smartphone y constató que el Banco San Juan le había notificado de transacciones realizadas desde su celular. Los movimientos habían sido tres por montos que van de $1.000.000, $500.000 y $300.000. Dichos montos fueron dirigidos a una cuenta identificada como , cuyo propietario era Elías Lionel Flores, dato que pudo constatarse con autoridades del club, ya que la misma estaba registrada a nombre del acusado.
La UFI Estafas informáticas tomó el caso y con las pruebas halladas en contra de Flores, el fiscal a cargo Duilio Ejarque llevó al hombre al banquillo de los acusados. Previo a la audiencia se logró un acuerdo de juicio abreviado y el acusado fue condenado a la pena de dos años de prisión de cumplimiento condicional, por resultar autor penalmente responsable del delito de estafa en carácter de autor y en perjuicio de Fernández. Además, el imputado deberá afrontar el pago de las costas del juicio.
Se dispuso también que durante el término de dos años el condenado debe cumplir reglas de conducta como fijar residencia y someterse al cuidado del Patronato de Presos Liberados y Excarcelados. Se le impuso la prohibición de acercamiento y contacto con el denunciante Carlos Enrique Fernández, en su domicilio o en lugares donde este frecuente y en un radio no menor a 500 metros. Por el plazo de 2 años se establece la prohibición de realizar actos molestos y/o perturbadores en perjuicio del denunciante.
Por último y pese a todos los pedidos de la Justicia el acusado no aceptó reparar el daño devolviendo el dinero que robó a su víctima, aduciendo no tenerlo y con el fallo judicial su deuda con la sociedad y el damnificado estará saldada.