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Cómo el Gobierno de Javier Milei busca contener la inflación
Gobierno con el foco puesto en contener la inflación: Javier Milei y Luis Caputo calmaron el mercado cambiario con la salida del cepo y ahora presionan para evitar subas en góndolas y un rebote inflacionario.
POR REDACCIÓN
Después de semanas difíciles, el Gobierno nacional recuperó la iniciativa económica. Con una salida parcial del cepo al dólar, Javier Milei y su ministro de Economía, , descomprimieron las tensiones cambiarias. El dólar libre bajó de $1230 a $1160, mientras que el mayorista pasó de $1080 a $1122, consolidando un salto cambiario más moderado del esperado. Ahora, el foco está puesto en contener la inflación, especialmente en los precios de alimentos y bienes de consumo masivo.
Este nuevo orden cambiario ya empieza a mostrar efectos positivos en la percepción social: un tracking del peronismo indica que la imagen presidencial de Milei subió del 40% al 42% en una semana. Pero el desafío está lejos de terminar. Los exportadores dudan en liquidar a precios más bajos, y los importadores volverán al ruedo tras la Semana Santa, lo que podría generar nuevas presiones sobre el dólar mayorista.
busca ahora acuerdos de precios "conversados" con empresas, evitando controles que históricamente fracasaron. El objetivo: frenar remarcaciones del 10% al 12% y mantener la inflación a raya en un momento sensible. En marzo, el IPC fue de 3,7%, pero los alimentos aumentaron 5,9%, lo que enciende las alarmas del oficialismo en un año electoral.
En paralelo, el escenario político se recalienta. En la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri quiere vencer a La Libertad Avanza el 18 de mayo para evitar que el PRO quede absorbido. Mientras tanto, en la provincia de Buenos Aires, el peronismo intenta cerrar listas de unidad, con Cristina Kirchner aún como figura central. La alianza entre el PRO y LLA podría imponerse, pero el desenlace es incierto.
En este contexto, los analistas financieros recomiendan aprovechar letras del Tesoro de corto plazo y plazos fijos con tasas que llegan al 38%. La estrategia del Gobierno parece dar resultados en el corto plazo, pero el verdadero test será mantener la estabilidad cambiaria sin perder competitividad ni empujar una nueva escalada inflacionaria.