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El Gobierno registró la mayor ejecución de gasto en un primer semestre en 10 años
El Gobierno ejecutó en el primer semestre el 45% del presupuesto, el nivel más alto en una década, superando el promedio histórico del 40%. Si bien las cuentas muestran superávit gracias a ingresos extraordinarios del BCRA, el ritmo de gasto actual podría obligar a nuevos ajustes o buscar financiamiento adicional para mantener las metas fiscales.
POR REDACCIÓN
Durante los primeros seis meses de 2025, el Gobierno nacional alcanzó un nivel de ejecución presupuestaria del 45%, el más alto registrado en los últimos 10 años para un primer semestre. Este dato contrasta con el promedio histórico del 40% para igual período desde 2015, según informes de la Asociación Argentina de Presupuesto Público (ASAP). El incremento se explica parcialmente por el impacto de la fórmula de ajuste previsional, que generó mayores erogaciones respecto de años anteriores.
El actual ritmo de gasto podría generar complicaciones hacia fin de año, ya que los $126 billones asignados como créditos presupuestarios podrían resultar insuficientes. De mantenerse esta tendencia, el Gobierno se vería obligado a implementar nuevos ajustes en el gasto o a buscar fuentes alternativas de financiamiento para cumplir con el objetivo de superávit primario del 1,6% del PBI previsto para este año.
Las cuentas públicas muestran un resultado financiero positivo de 13,93 billones de pesos y un superávit primario de 19,03 billones hasta junio. Sin embargo, estos números están influenciados por las utilidades excepcionales del BCRA registradas en abril. Excluyendo estos ingresos extraordinarios, el superávit financiero se reduce a 1,64 billones (equivalente al 2,3% de los ingresos totales) y el primario a 6,73 billones.
A lo largo del año se implementaron diversas modificaciones presupuestarias, incluyendo el Decreto 1131/2024 para la adecuación inicial del gasto, el DNU 186/25 que recortó erogaciones por 8.075 millones de pesos, la Decisión Administrativa 10/25 que amplió créditos por 24.800 millones, y el DNU 425/25 que incrementó recursos en 43,86 billones y gastos en 31,39 billones.
La comparación con períodos anteriores muestra una notable mejora en las cuentas públicas. Mientras en el primer semestre de 2023 se registró un déficit equivalente al 34,5% de los ingresos totales, en 2024 se alcanzó un superávit del 0,8% y en 2025 este se elevó al 2,3%, excluyendo las utilidades del BCRA.
El escenario plantea desafíos para la segunda mitad del año, donde históricamente se concentran los mayores niveles de gasto. Las opciones disponibles incluyen ajustes adicionales al gasto público, la búsqueda de nuevos ingresos a través de mayor recaudación o financiamiento, o eventuales modificaciones presupuestarias si se aprueba el paquete fiscal actualmente en discusión en el Senado.
Este contexto fiscal se desarrolla en paralelo a un escenario cambiario con el dólar oficial acumulando un alza del 7,8% en nueve ruedas, mientras el Gobierno proyecta para 2026 una inflación del 22,7% y un crecimiento económico del 5,5%, manteniendo estable el tipo de cambio hasta fin de año.