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Reforma laboral: la CGT se movilizó y amenaza con un paro nacional
La central obrera se movilizó en Plaza de Mayo contra el proyecto impulsado por el Gobierno y advirtió que podría avanzar con una medida de fuerza nacional.
POR REDACCIÓN
La Confederación General del Trabajo (CGT) se movilizó este martes frente a la Casa Rosada para rechazar el proyecto de reforma laboral que impulsa el gobierno del presidente Javier Milei y que el oficialismo busca llevar al Senado antes de fin de año. La protesta incluyó un acto en Plaza de Mayo y la advertencia de un posible paro nacional si no hay respuestas a los reclamos sindicales.
“Es el primer paso de un plan de lucha. Si siguen sin escucharnos, terminaremos en un paro nacional”, afirmó Jorge Sola, secretario general del Sindicato del Seguro y uno de los integrantes del triunvirato que conduce la Confederación General del Trabajo. El dirigente encabezó el acto junto a Cristian Jerónimo, del sindicato del Vidrio, y Octavio Argüello, de Camioneros, quienes debutaron como principales voceros de la nueva conducción cegetista.
El escenario fue montado frente a la Pirámide de Mayo, con vista al Cabildo, y tuvo como consigna central “En defensa del trabajo y la dignidad”. Desde allí, los dirigentes cuestionaron el contenido del proyecto oficial, al que definieron como “regresivo y precarizador”, y señalaron que concibe al trabajo como un costo a reducir y no como un derecho.
Argüello fue el primero en plantear de manera directa la posibilidad de una huelga nacional. “Si no nos escuchan, vamos a terminar en un paro en todo el país”, sostuvo. Luego, Jerónimo apuntó al contexto económico y laboral en el que se discute la iniciativa: aseguró que se perdieron 276 mil puestos de trabajo y que cerraron unas 20 mil pymes, y cuestionó el impacto real de la reforma en la generación de empleo.
Las columnas sindicales ocuparon el centro de la Plaza y sus alrededores, con presencia de gremios como Uocra, UDA, Smata y el sindicato del Vidrio. En los días previos, la conducción de la CGT mantuvo reuniones con intendentes bonaerenses y dirigentes del peronismo, y durante la jornada se sumaron también movimientos sociales y agrupaciones de izquierda.
En un documento difundido durante la movilización, la central obrera advirtió que la reforma laboral facilitaría los despidos, debilitaría a los sindicatos y no generaría nuevos puestos de trabajo. Además, el discurso sindical caracterizó al Gobierno como una administración que prioriza las demandas del capital financiero por sobre las de los trabajadores.
La protesta tuvo un fuerte impacto en el tránsito del centro porteño. La avenida 9 de Julio permaneció cortada desde Belgrano hacia el norte por el avance de columnas gremiales, mientras que la avenida de Mayo estuvo interrumpida desde la 9 de Julio hasta Plaza de Mayo. El operativo de seguridad fue coordinado entre la Ciudad y la Nación, con presencia de efectivos de la Policía de la Ciudad.