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La China no va al casamiento de Cabré porque Icardi no está invitado
Pese a haber confirmado su asistencia, la China Suárez revirtió su decisión sobre la boda de Nicolás Cabré y Rocío Pardo.
POR REDACCIÓN
El casamiento de Nicolás Cabré y Rocío Pardo, que está programado para celebrarse en los primeros días de diciembre, se ha convertido en uno de los eventos más comentados del espectáculo. La expectativa es alta debido a la presencia de figuras cercanas a la pareja y los vínculos familiares que atraviesan la ceremonia. Inicialmente, entre los invitados figuraba la China Suárez, expareja de Cabré y madre de su hija, Rufina. Aunque en un comienzo la actriz iba a asistir, en el último momento se conoció que decidió cancelar su presencia.
Según reveló Yanina Latorre en SQP, la actriz había confirmado su asistencia a la boda, pero luego optó por dar marcha atrás por un motivo inesperado. La conductora opinó que la razón detrás de la cancelación "Es muy tóxico". De acuerdo con la versión de Latorre, la determinación estuvo vinculada directamente a Mauro Icardi. La periodista aseguró que "Como Icardi no puede dejar Estambul y el Galatasaray para venir al casamiento, ella se bajó después de confirmar su presencia". Latorre fue enfática al afirmar que "Ella sola no viene", dejando claro que la imposibilidad del futbolista de acompañarla influyó en la decisión de la China Suárez.
Pese a no estar presente en la celebración, la actriz no quiso quedar completamente al margen y se conoció que enviaron "un regalo caro" a los novios como gesto.
La situación generó controversia debido a que, si bien la China Suárez no viajará, su hija Rufina sí estará presente en la boda de su padre, ya que permanece en Argentina para acompañarlo en este momento importante. La actriz, por el contrario, optó por quedarse en Turquía junto a Icardi, con quien convive desde que se instalaron en Estambul por los compromisos futbolísticos del delantero. La ausencia de la China Suárez en un evento donde su propia hija será protagonista ha alimentado el debate en redes sociales, donde algunos usuarios consideraron su decisión como llamativa. A pesar de la polémica, la ceremonia seguirá adelante con la presencia de Rufina y el entorno cercano de la pareja, mientras que la actriz mantiene su vida familiar y agenda fuera del país.